Atlixco, Pue., a 11 de noviembre de 2016.- (Con información de El Sol de Puebla) Paranoia, incertidumbre y temor, son las expresiones más comunes entre los migrantes ilegales radicados en los Estados Unidos y sus familias atlixquenses tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de aquel país del norte. Cálculos oficiales indican en el área de New York y New Jersey viven más de 35 mil personas oriundas de este lugar, quienes enviaron de enero a septiembre de este año 88 millones de dólares.
José Eduardo Domínguez platicó vía telefónica con su papá, quien radica desde hace más de ocho años en Red Bank, New Jersey, mientras seguían transcurriendo los últimos números de la elección presidencial. Antes de colgar su padre, de nombre Eduardo, confió: “No te preocupes, aquí voy a seguir hasta poder pagar la última mensualidad de la universidad. Todo saldrá bien”. Y colgó.
La postura antiinmigrante de Trump para esta familia no es nada nuevo. En entrevista en este municipio con Ángel –abuelo de Eduardo y padre del migrante– describió que “todos los días, desde 1999, año del primer viaje de nuestros hijos, vivimos con una tensión: en cualquier momento pueden deportarlos por ser ilegales.