Morelia, Mich. a 15 de diciembre de 2016. – Para la Diputada por el Partido del Trabajo, Brenda Fabiola Fraga Gutiérrez, es fundamental, que las fuerzas militares dejen las calles, debido a los riesgos e implicaciones sobre los derechos humanos, por el posible uso excesivo de la fuerza y los ya conocidos procedimientos que emplean en tareas de inteligencia, investigación y represión.
La diputada argumentó que es tardío y obsoleto pretender presentar un marco normativo para “legalizar” y “normar” la actuación de las fuerzas armadas en estas tareas. Y refirió que es imprescindible que el gobierno federal realice un diagnóstico serio, puntual y autocrítico de los costos sociales, políticos y económicos de la militarización de la seguridad pública, antes de pretender “normalizarla”.
Explicó que además del daño terrible debido a enfrentamientos entre grupos criminales, la actuación de las fuerzas armadas y las policías se ha visto constantemente empañada por abusos de poder, violación de derechos humanos, desaparición forzada y asesinatos, “se justificaron conceptos con enormes implicaciones sociales como el de abatir, que es la forma legítima en que el Estado, asesinaba justificadamente a presuntos criminales”.
Ahondó en que el Estado ha sido incapaz de atender a las víctimas de estas acciones atroces como víctimas de guerra, quedando sólo para la actuación gubernamental como “daños colaterales” fuera de su responsabilidad.
Como consecuencia de lo anterior, afirmó la diputada, tenemos a un ejército desgastado, criticado y juzgado, pues acontecimientos cotidianos investigados por organismos de Derechos Humanos y lamentables hechos como los de Tlatlaya y Ayotzinapa han contribuido en generar un cuestionamiento social a la actuación del ejército en tareas civiles.
Finalmente, la diputada petista, expresó que el desgaste que sufren hoy las fuerzas armadas, no sólo es producto de su actuación, sino que los gobiernos
en turno las han incorporado de forma irresponsable e improvisada en tareas que no son propias de su estructura y funciones, “es fundamental preparar la retirada de las fuerzas armadas de las tareas de seguridad pública en nuestro país para asignarles sus verdaderas funciones”.