Morelia, Michoacán, a 3 de abril de 2020.- Con la finalidad de privilegiar la vida de las mujeres y los hombres del campo ante la pandemia del COVID-19, así como de las y los trabajadores que operan los diferentes programas del agro michoacano, la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario (Sedrua), analiza reducir la operación de varios de ellos, hasta en un 70 por ciento.
Rubén Medina Niño, titular de la dependencia, se reunió con subsecretarios y directores, para analizar la viabilidad operativa, legal y administrativa, pensando en todo momento en la salud de todas y todos y la de sus familias.
Programas como el de Infraestructura Básica Agropecuaria, que cuenta con 250 equipos de maquinaria pesada e igual número de empleados que las operan, podría quedar en pausa y sólo trabajar en casos de extrema urgencia, ya que la mayoría de los equipos se encuentran asignados a varios Ayuntamientos del Estado, para llevar a cabo labores de rehabilitación de caminos rurales, por citar algunas obras.
De igual manera, el Programa de Agricultura Sustentable, podría tener varias modificaciones en su operación, ya que no habrá reuniones masivas de capacitación, pero las y los productores podrán dar continuidad a través de las Delegaciones Regionales, por las vías institucionales ya conocidas.
Un programa que sin duda resulta de vital importancia en el campo michoacano, es el de Sanidades Agrícola, Pecuaria y Pesquera, que atiende a más de 545 mil hectáreas en favor de más de 110 mil productores, a través de 14 campañas fitosanitarias, además de 10 zoosanitarias en beneficio de 10 mil productores.
Este programa continuará gracias a la organización que mantiene el Comité Estatal de Sanidad Vegetal (CESV), así como de sus organismos auxiliares, que son las Juntas Locales de Sanidad Vegetal (JLSV) y que operan un recurso superior a los 90 millones de pesos, otros 20 millones más para el sector pecuario y 12 para el sector acuícola.
Finalmente, Medina Niño resaltó que en el campo michoacano no se paran los trabajos, pero sí tendrán una reducción de un 70 por ciento en su operación, para privilegiar la salud de las y los michoacanos; además de redoblar las medidas de seguridad sanitaria en parcelas, empaques y traslado de los productos del campo.
