Lagunillas, Mich., a 25 de Agosto del 2020.- El Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario (Sedrua), continúa con la difusión de los conocimientos del Programa de Agricultura Sustentable, y ahora tocó el turno a los municipios de Lagunillas y Huiramba, donde se impartió un taller sobre las técnicas agroecológicas para recuperar la nutrición y la fertilidad de los suelos.
Rubén Medina Niño, titular de la Sedrua, señaló lo anterior tras informar que en estos municipios se monitorean cultivos de maíz y jitomate, en donde además se capacitó en la elaboración de un descompactador de suelos y más técnicas amigables con el medio ambiente.
El funcionario explicó que, a través de las diez delegaciones Regionales de la Sedrua, en coordinación con los técnicos especialistas del programa, se atienden a más de 60 municipios.
Bajo esta premisa, se realizó un recorrido de monitoreo y seguimiento a productores de maíz y jitomate de los municipios ya citados, teniendo como objetivo revisar el crecimiento radicular y el desarrollo del cultivo, así como la incidencia de plagas y enfermedades.
Tras el recorrido, el técnico especialista Erick Hernández detalló las observaciones y sugirió las recomendaciones para el control del gusano cogollero, ácaro bronceado y nematodos, las principales plagas que inciden en estos cultivos.
Durante el recorrido de seguimiento y monitoreo, se pudo recoger el testimonio del productor Esteban Chávez, perteneciente a la localidad de Ojo de Agua de Pastores, municipio de Lagunillas, el cual se encuentra muy satisfecho por la turgencia del follaje, la resistencia ante el viento y el desarrollo radicular que ha logrado su cultivo de maíz con 2 aplicaciones de los insumos del programa.
De acuerdo con los técnicos Erick Hernández y Diana Juárez, los bioinsumos y las técnicas agroecólogicas del programa, en conjunto con un suelo que el mismo productor ha fabricado en más de 30 años aplicando materia orgánica a su suelo, han dado como resultado un excelente desempeño en el cultivo que despegó más rápido que otros años, gracias a los aminoácidos y el fertilizante foliar de Agricultura Sustentable.
